lunes, 29 de agosto de 2011

Cuando hablamos de problemas, no nos paramos a pensar, en lo que importa de verdad y en lo que no.
Parece que tenga una vida de cuento de hadas, solo por la razón de ser feliz y sonreír, cuando las cosas no son ni la mitad de bonitas de lo que parecen. Hablamos de un problema que tiene mucha gente a esta edad, un complejo que solo hace que atormentarnos con la comida, con las bebidas, con tu marcha diaria. Cuando llegas a la conclusión de que ya no puedes más,que necesitas explotar, ¿por que? Porque nadie te va a decir lo mismo que piensas, los que te quieren de verdad, intentaran sacarte de ahí, diciéndote que estás genial, que ya les gustaría a muchas estar así, y ahí es cuando tu piensas, ¿a muchas? y después te vas a todos esos recuerdos que tienes de más de una persona que no son amigos diciéndote lo que quieres escuchar, que a la misma vez es lo que te atormenta. Entonces es cuando caes, caes en silencio, porque cuando hablas del tema con tus amigas, solo les sale de la boca, un ya estamos con el tema, o un vaya tonta.. Pero, tu..¿quieres que te escuchen verdad? Necesitas escuchar esa verdad que nadie te contesta para continuar, o quedarte quieta. Son cosas que pasan, hay de verdad, hay quienes juegan, hay quienes quieren llamar la atención, y hay quienes la sufren, y lo peor es que la sufren y se callan.  

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